El uso constante de productos llenos de sustancias tóxicas puede provocar rudos efectos en la salud y a su vez en el medio ambiente, es por eso que debemos ser consientes de lo que usamos.

Los efectos sobre tu salud se pueden clasificar en dos:

  • Efectos a corto plazo: surgen casi inmediatamente después de usar dichos productos, por ejemplo, la inhalación del cloro provoca irritación respiratoria o usar disolventes en lugares mal ventilados, puede provocar náuseas, vómitos, dolores de cabeza, etc.
  • Efectos a largo plazo: estos suelen ser más lentos, requieren exposiciones repetidas y pueden tardar meses o años en aparecer. Es llamada toxicidad crónica y entre los efectos más graves se encuentra el cáncer, las alteraciones genéticas, las reacciones alérgicas, alteraciones hormonales y la toxicidad del sistema nervioso.

Por otra parte, entre los peligros para el medio ambiente, destacan:

  • Ecotoxicidad: sustancias altamente toxicidad para los seres vivos
  • Contaminantes del agua: incluyen sustancias que favorecen el crecimiento excesivo de algas o plantas dificultando la vida acuática como los nitratos o plaguicidas.
  • Persistentes: son sustancias que permanecen en el medio ambiente, no se degradan fácilmente y por tanto permanecen en el agua o suelo por muchos años, convirtiéndose en una amenaza para la salud.
  • Bioacumulativas: estas se acumulan en los tejidos grasos de los animales que consumimos, provocando asó graves daños para la salud.

Como podrás darte cuenta, son muchos los riesgos que corremos al no ser cuidadosos con lo que consumimos, pues no solo nos afecta a nosotros sino al mundo entero.

¡Cambiate ya a lo natural!